¿Te has preguntado alguna vez cómo tu forma de pensar influye en quienes te rodean? Cambiar ese enfoque podría mejorar tanto tus vínculos como tu calidad emocional common.
Utiliza las estrategias mencionadas anteriormente para contrarrestar estos patrones de pensamiento y cultivar una mentalidad más positiva y equilibrada. Recuerda que el autocuidado y la autocompasión son aspectos clave en el proceso de gestionar los pensamientos negativos y fomentar un bienestar emocional duradero.
“Hablamos de esquemas que comienzan a construirse en la infancia, a través de nuestra historia, de las experiencias vitales, de lo que vamos viviendo, los roles que ocupamos, las posiciones familiares en las que nos ubicaron y te ubicaste.
Pensar en lo que te da felicidad: centrarte en pensamientos positivos puede hacer retroceder los negativos. Hacer una lista diaria de cosas buenas puede ayudarte a revalorizar aspectos de tu vida que antes pasaban desapercibidos.
Los pensamientos negativos pueden ser eliminados entrenándonos a nosotros mismos y recibiendo la orientación adecuada, a continuación se mencionan algunas técnicas que pueden ayudar a controlarlos:
Las rumiaciones son patrones de pensamiento excesivos. Podemos pensar una y otra vez en una concept convencidos de que cuanto más pensemos en ella más capaces seremos de solucionarla, a pesar de que esto es una acción totalmente inútil y que nos hace perder el tiempo y gran parte de nuestras energías.
El pensamiento negativo es un tipo especial de pensamiento en el que una persona ve obstáculos sólidos, dificultades en el camino hacia la consecución del objetivo y fantasea con el triste desenlace de los acontecimientos.
Según el neuropsicólogo Rick Hanson, a lo largo de la evolución nuestro cerebro se ha programado para centrarse en lo negativo y relegar lo positivo a un segundo plano. Esto se debe a que cada día tenemos que tomar decenas de decisiones, resolver muchos problemas, estar en movimiento y activos.
Cuando tenemos un desacuerdo con nuestro cónyuge o pareja, o nos decepcionan de alguna manera, es fácil caer en la trampa mental de sentirnos poco queridos y apreciados.
En resumen, el pensamiento negativo no solo afecta cómo ves el mundo; impacta directamente tu calidad de vida. ¿Te has dado cuenta de cómo esos pensamientos pueden moldear tus experiencias diarias?
Es decir, los pensamientos negativos provocan una reacción emocional negativa en nuestra mente, la misma here que hace que aparezcan más pensamientos negativos y caigamos en un círculo vicioso del que es difícil escapar.
Nuevo pensamiento: La buena salud es mi derecho de nacimiento y soy inmune a las enfermedades. Bendigo mi cuerpo a diario y lo cuido bien.
Predictivo: Es un pensamiento que tiene la función de adelantarse a la realidad sacando conclusiones precipitadas para evitar el sufrimiento.
Ejemplo: pocas personas escriben comentarios positivos sobre un servicio o producto, pero si algo no les ha gustado, no escatimarán tiempo y esfuerzo en escribir un comentario enfadado.